La comunicación de campo cercano (NFC, por sus siglas en inglés) es una tecnología inalámbrica de corto alcance que permite la comunicación entre dispositivos compatibles cuando están a pocos centímetros de distancia. Esta tecnología ha ganado popularidad en la última década debido a su facilidad de uso, seguridad y versatilidad en diversas aplicaciones. NFC se basa en la tecnología RFID (Identificación por Radiofrecuencia) y ha sido adoptada en una amplia gama de industrias, incluyendo pagos móviles, transporte, marketing y control de acceso.
De acuerdo con información pública, la tecnología NFC opera a una frecuencia de 13.56 MHz y permite la transferencia de datos a velocidades de hasta 424 kbit/s. La comunicación se establece cuando dos dispositivos compatibles, uno activo (emisor) y otro pasivo (receptor), se acercan a una distancia de hasta 10 centímetros. El dispositivo activo genera un campo electromagnético que alimenta al dispositivo pasivo, permitiendo la transferencia de información.
De igual forma, sitios especializados hacen referencia a que existen tres modos de operación principales en NFC:
1. Modo de lectura/escritura: Un dispositivo con dicha herramienta tecnológica puede leer o escribir información en una etiqueta NFC pasiva, como un póster interactivo o una tarjeta inteligente.
2. Modo de emulación de tarjeta: Un dispositivo NFC, como un teléfono inteligente/smartphone, puede actuar como una tarjeta inteligente, permitiendo pagos sin contacto y acceso seguro a edificios.
3. Modo de comunicación punto a punto: Dos dispositivos pueden intercambiar información directamente, como compartir contactos, fotos o archivos pequeños.
Una de las aplicaciones más conocidas de NFC es en el ámbito de los pagos móviles. Servicios como Apple Pay, Google Wallet y Samsung Pay utilizan NFC para permitir a los usuarios realizar transacciones seguras simplemente acercando su teléfono a un terminal de pago compatible. Esta tecnología no solo facilita las transacciones rápidas, sino que también incorpora medidas de seguridad avanzadas, para proteger los datos del usuario.
En el sector del transporte, NFC se utiliza para sistemas de billetes electrónicos. Los usuarios pueden cargar sus tarjetas de transporte en sus smartphones y usarlos para acceder a metros, autobuses y trenes con un simple toque. Además, la tecnología NFC se emplea en sistemas de control de acceso en edificios y eventos, proporcionando una forma segura y conveniente de verificar la identidad y gestionar entradas.
Este tipo de tecnología también tiene aplicaciones en el marketing interactivo. Las empresas pueden utilizar etiquetas NFC en sus productos o anuncios para proporcionar información adicional, ofertas especiales o experiencias interactivas a los consumidores. Por ejemplo, un usuario puede tocar su teléfono en una etiqueta en una tienda para recibir un cupón de descuento o detalles sobre un producto.
En el sector de la salud, se está utilizando para mejorar la eficiencia y precisión en la gestión de datos médicos. Las etiquetas NFC pueden almacenar información médica crítica que los profesionales de la salud pueden acceder rápidamente en situaciones de emergencia. Además, los dispositivos portátiles con esta herramienta pueden monitorear y transmitir datos de salud, como la frecuencia cardíaca y los niveles de actividad física, a aplicaciones móviles o sistemas de salud electrónicos.
La tecnología NFC ofrece una solución innovadora y eficiente para la transferencia de datos y la interacción sin contacto en diversas industrias. Con su capacidad para mejorar la seguridad, la conveniencia y la experiencia del usuario, ella está destinada a jugar un papel crucial en la comunicación inalámbrica y la interacción digital.
Y tú, ¿qué más conoces sobre NFC?
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David Villanueva Lomelí